miércoles, julio 08, 2009

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Se podrían escribir cientos, miles de cosas sobre muchos asuntos; novelas, ensayos, guiones, síntesis, opiniones y la lista es larga. A mi siempre me ha gustado escribir, pero por las cosas que nos pasan, las diferentes causas, motivos, qué se yo, simplemente razones... No he sido contínuo, me me faltado practicar y escribir realmente lo que siento, lo que vivo y lo que veo. Y aparte de que descargo gran parte de mi tensión, me volver atrás y recordar aquellas pequeñas cosas que con el tiempo se van quedando enterradas, se van cubriendo de polvo, llamado olvido. Hasta que de repente uno se da cuenta de lo valioso que se podía perder si no se plasma o al menos se recuenta en algún pequeño papel.

Podría decirse que escribir es un deporte y si no se practica regularmente se tiene el riesgo de mandar gran parte de nuestro razonamiento, nuestra psique al olvido, al cesto de la basura. Afirmo y compruebo que eso me estaba ocurriendo, hasta que redescubrí que tan placentero es redactar simplemente por le hecho de hacerlo. Es algo tan sencillo y reconfortante, que las palabras brotan solas, el lápiz o la pluma solo las delinea, y quedan establecidas de tal forma que nos patea el corazón y los intestinos (y uno que otro órgano) de la alegría se saber lo que acabamos de plasmar en papel, o en la computadora (visto que hoy en día está muy in o a la moda la tecnología que lo demás pareciera obsoleto) y que es una manera practica y sencilla de proyectar lo que pensamos o damos a entender.

Ya sea a mano a o 'máquina' escribir es y seguirá siendo el escaparate perfecto para unos cuantos que nos gusta jugar con las palabras (jugar, conjugar o armar y desarmar oraciones =) que al final, a alguien mas le parecerá importante o al menos interesante y probablemente entenderá una pequeña parte del sentir del escritor. Sería introducirse a un mundo nuevo donde el autor quiere dar a conocer su forma de sentir, de ver el mundo y lo más seguro de darnos alguna pista para entender un poco su filosofía de vida. Son tantas cosas que de repente me dan ganas de parar y hacer un recuento de todo lo que he escrito. Pero al final de cuentas, sólo son palabras, que están ahi para quien quiere leerlas y entretenerse un poco. Esto es solo un poco, una muestra de tantas cosas que tiene uno en la cabeza :-) Solo queda leer y leer y del otro lado escribir y escribir. Saludos.

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